Tonino Carotone
Tonino, tiene mucha jeta, no se corta un pelo, quizás lo único que se recorta y perfila a golpe de tijeretazo es el bigote fino, tirita del ancho de un hilo dental brasileiro, que tunea eso de lo que tiene para dar y tomar: morro.
Para ragazzo Toñín sonreír es una cosa muy seria ¡Eh! Y como su amigo Marco, el del pueblo italiano, se levanta muy temprano pero para buscar y combatir a base de alegría el putto futturo inciertto que sobrevuela, como un nublao, nuestras cabezas.
Éste artista pícaro y burlón ha encontrado en el Savoir Fairy Mediterráneo la lejía de expresión musicale y vitale para expresar lo que le sale del coure y parte de sus Huajalotes.
“Sapore di mare, antimilitare
yo no son terrorista, ma no son pacifista.
Yo no credo en la guerra, ma yo fato el amore
Sapore di mare es la libertée”
Tonino es un vividor al que no le gusta que le obliguen a decir ¡Sí Señor , Señor! Y dijo NO! A la invitación a desfilar enfundado en una chaqueta metálica. De regalo le obsequiaron con unas vacaciones, pulserita “todo incluido”, en el trullo. Se llama privación de la libertad. Por un tiempo: Mucha reja y nada de raja. ¡Olé tus huevos Tonino!
“La mejore defensa, es la tua resistensa,
contra tuto podere, ma qui a te no respeta”.
La mili, gracias a los que plantaron cara al poder, se abolió, por eso hay que ser agradecido a la gente que desde la lucha activa combate todo tipo de injusticias. Gracias a los ladridos ante el par de Leones que acampan frente al Congreso, de vez en cuando suena la flauta y..: ¡Damos un pasito palante y pásame el de María!
Pero eso pasó hace un temppo mas non troppo, después, este nómada, se echó unas coplillas por la Italia y parece que caló. Después me lío me lío… y acabó cantando con el mismísimo ¡Celentano!. Todo un mérito para alguien que ha nacido, en los aledaños de Atapuerca, y criado en Pamplona, allí dónde San Hemingway conoció a Fermín.
Me topé con Tonino en ese BarrioBabel que es el Lavapiés de Madriz. Por ahí estaba este jamberro amante de la calle y sus “worldcoloridostranseúntes” , hablen el idioma que hablen. Cuenta Carotone que en Lavapiés se despierta y tarda un buen rato en escuchar palabras en castellano. El que quiere entenderse se entiende y el que quiera pelea… que se busque un gallo.
Ocurrió en la Sala Juglar y todo el que estuvo allí gozó como Da Vinci el día que descubrió el “Semiornitóptero”. Allí estaba , disfrutando todo feliciano, el campechano Alcalde del Barriopiés. A los coros Piluka, esa mujer alegre de la vida, la gran dama del escenario, más maja que las pesetas de real, la mano que mece la pandereta, la voz dulce que arropa la garganta ruda del “The King of the Kalimotxo”.
Tonino, coge todo tipo de legumbres del campo y hace el pucherito a su way, abre su abanico musical al mundo y aquí nos deleita, por qué no, con una guajira puro sentimiento, la misma con la que debutó otro gran famous crooner llamado José Feliciano, cuando era un párvulo, a los 10 añitos.
“Amor Jíbaro” nos cuenta la historia de un campesino que vive rodeado de todo tipo de animales pero que en su soledad, hambruna de hembra, quisiera que sus amiguitos de corral fueran una mujer… Que lo disfrutéis, no perdáis la pista al ragazzo Tonino y recordad que “La felicitati a momenti”.
Ah! Y que conste que yo también me orino en el Amor.
Muy bueno mi nene, un besin!!