Como mi ‘Capullo’ no hay dos.
Te lo digo a la cara :
“Como mi ‘Capullo de Jerez’ no hay otro igual”.
Los artistas , los que nacen con ese don, los verdaderos, lo son porque son únicos, y éste cantaor flamenco, nacido en el Barrio de Santiago , no tendrá clon ni oveja Dolly que lo baaaale. Mi ‘Capullo’ ni se muta ni se transforma ; los chinos han intentado hacer copias de él pero nasty de plasty con el oríginal.
Salgo al balcón con mi bandera de lunares y declaro al ‘Capullo de Jerez’ : ¡Patrimonio Flamenco ‘Impar’ de la Humanidad!.
El ‘Capullo de Jerez’ es auténtico, lo suyo no es dar conciertos, él comparte fiesta. Al ‘capullo’ no le van las florituras. No se guarda nada para él, su entrega sobre el escenario es máxima. Transmite más que una parabólica. su conexión en directo es de alto voltaje y da igual que seas niño , joven o pensionista , porque su arte no entiende de edades, tattoos , ni tupés.
El olé es una mágica palabra que no tiene explicación.
Él es de dentro pa’ fuera y eso es lo que hay. Esa es su verdad aquí y en Sebastopol. De fiesta con sus amigos , delante del Tiri –ti- trán- trán –Trump! y del que haga falta. Cómo diría Rosendo : ¡Que no se vende el Rock and Roll!
Y es que a mí el Capullo en actitud me parece muy rockero , casi punk porque no se corta. Se deja llevar por la espontaneidad , el eléctrico ‘chispazo’ del instante no lo deja escapar. Lleva más de cuarenta años sobre el escenario terráqueo y no ha perdido frescura ni ganas de contagiar alegría :” Un globo, dos globos, tres globos, la luna es un globo donde vivo yo”.
Simpático, creativo y con ‘reflejos’ , si hay buen ‘feeling’ con el público improvisa letras ‘a compás‘. Ole tú y que tiemblen las peleas de gallos!
“Si transmites , comerás toda la vida”.
Su voz suena añeja, a barrica fermentada por unas vivencias flamencas desde chiquitito. A los doce años fue su primera actuación en la plaza de toros de Jerez y de ahí hasta hoy… vivir para cantarlo. Sus tres pilares: Fernando Terremoto, Chocolate y Agujetas. Su presencia física impone. Alto, desgarbado,melena luminosa y con unos ojos negros que cuando entra en trance se le salen de las órbitas. El Capullo de Jerez cuando está inspirado se transmuta , miedito me da imaginármelo una noche llena de luna engolfada.
Aquí os dejo una parte de la fiesta que nos brindó en el Café Berlín de Madrid, muy bien acompañado por Manuel Jero, José Rubichi y José Peña.
Una banda rebosante de compás y con más tablas que el ‘Leroy Merlín’.
Tienen mucho groove, tienen mucho arte y si están agustito ¡vaya disparate! Y es que ya entenderéis porque afirmo que “Cómo mi Capullo de Jerez no hay dos”.
Gracias generoso Capullo por compartir por el mundo este arte tan tuyo.
Ricardo Carrillo de Albornoz también estuvo allí y nos dejó estas magníficas fotos Muchas gracias amigo, que más noches alumbren nuestras vidas. Déjense hipnotizar por sus fotografías.
Seguiremos disfrutando. Salud, alegría y musicón.
Maaaaaaaan! Yo no soy muy de Capullos, pero me hablas de Jeré y me abro como una flor…….
Y Aunq este capullo no sea del tipo que el dia estropea, mas bien es de pasar la noche bailoteando su rumba flamenca!!
Ole tu ! Que nos veamos siempre , pequeñin !
Al capullo no le van las flores!!
Que siga tan florindo
Gracias por tu feedback primaveral. Una caña ya!